En la historia del rock y del metal mexicano pocas agrupaciones han logrado encender tanto la chispa de la contracultura como Resorte. Nacida en la Ciudad de México a mediados de los años noventa, la banda irrumpió en la escena con una propuesta explosiva que combinaba el rap, el metal y la actitud de protesta en una fórmula única que los colocó como pioneros del nu metal en Latinoamérica. Su sonido crudo, sus letras directas y su energía en el escenario los convirtieron rápidamente en una referencia obligada para toda una generación que buscaba romper moldes y encontrar su propia voz.
Resorte se formó oficialmente en 1995, en una época en la que el metal en México estaba fragmentado y con poca exposición mediática. Integrada originalmente por Tavo Limongi en la guitarra, Gustavo “Tavo” Limongi y Gabriel “Queso” Bronfman en el bajo y voz, además de otros músicos que fueron sumándose en diferentes etapas, la banda encontró su sello al fusionar riffs pesados con rimas agresivas, influencias del hip hop y un groove demoledor. Desde sus primeros ensayos quedó claro que no buscaban sonar como nadie más, sino construir su propio lenguaje musical.
Su debut discográfico llegó en 1997 con «República de Ciegos», un álbum que sacudió a la escena local gracias a sencillos como América y Vive. El disco no solo fue un éxito entre los seguidores del rock duro, sino que también abrió puertas en la radio y en festivales dónde pocas veces el metal tenía cabida. La crítica destacó su capacidad para capturar la rabia y la inconformidad social sin perder frescura ni accesibilidad. A principios de la década de los 2000 y para adelante, Resorte, experimento varios cambios en su formación así como una experimentación sonora. Ahora, regresando a sus raíces y con un elenco fuerte de generaciones mas jóvenes y bajo la batuta de Juan Chávez y Gabriel Bronfman, continuan con el legado de lo que es la marca Resorte. Este año, Resorte celebra tres décadas de trayectoria, algo que pocas bandas en México han logrado alcanzar manteniendo la coherencia artística y la fuerza en el escenario. Para ellos, estos 30 años no han sido fáciles ni lineales, pero cada reto y cada etapa han forjado una identidad sólida que sigue inspirando a músicos y fans por igual.
El Cuartel del Metal, charló con Gabriel “Queso” Bronfman:
—30 años se dicen fácil o difíciles, ¿para Resorte que significa llegar las tres equis?
— Por ahí siempre me dicen, no, se dice fácil, digo no, ni se dice ni se viven fáciles. La verdad es que han sido 30 años que han sido, pues bien, bien, pues bien vividos. Hemos hecho un proyecto que nos ha superado en el sentido de que ha sido un proyecto que es más grande que nosotros como personas y que ha funcionado a través del tiempo y que sigue manteniendo su esencia después de tanto tiempo y de tantos integrantes y de todo. Entonces, la verdad es que estamos muy felices con Juan, que somos los que quedamos, digamos, de este Resorte que comenzó hace 30 años. Pues muy felices de estar celebrando, pero con la vista puesta en el futuro de la banda, porque estamos sacando música nueva. Entre tanta actividad, lanzamos a finales el año pasado y comienzos de este él, República Zombie, que fue un disco que nos puso a tocar por distintos lugares de la República Mexicana. También nos llevó a Colombia, nos llevó a Estados Unidos al Aftershock, a un festival gigante de metal de la costa oeste de los Estados Unidos. Y nada, pues ahora estamos sacando un EP, una rola nueva que está por salir y celebrando 30 años, que se celebraron en tres ciudades distintas, las más representativas de nuestra nación y las que fueron parte angular para el desarrollo de la banda. En Guadalajara, Monterrey y Ciudad de México, todas un éxito y posterior salir adelante con las fechas como lo estamos haciendo. Y eso es algo muy interesante.
—La información esta en internet, pero no hay cómo la viva voz, cuando nació Resorte, pues sí había conjuntos, introducían un poco las líricas de hip hop, unos cuantos lo integraban, hay otros que se dedicaban íntegramente en México a hacer solamente heavy metal, pero ustedes presentaron una propuesta sonora que nadie estaba haciendo, nadie la había tomado en cuenta, por así decirlo. ¿Cómo fue el decir levantamos la mano y queremos presentar este sonido a México? qué, pues, pegó, pegó demasiado rápido.
—Fíjate que la percepción que uno tiene siempre va a ser, como muy particular. Yo, como lo veo, es esta es una idea que empezó rebotando, como lo decimos al principio de este nuevo disco, entre dos personas que fueron Juan y Tabo. Ellos tenían una inquietud y Tabo había estudiado periodismo, además de ser músico, y Juan comunicación, además de ser músico. Entonces, de ellos sale como esta inquietud de gritar las cosas y de hacerlo de un modo hasta ese momento diferente en México. Entonces, venía mucho basado en esta nueva mezcla, nueva para ese momento, entre el rap y lo pesado. Entre el hip hop y lo pesado. Entonces, las primeras crossovers entre Helmet con House of Pain, entre Anthrax y Public Enemy, las primeras mezclas de Faith No More, se volvieron para nosotros así como las cosas de Rage Against the Machine, del primer disco. Entonces, fueron como influencias que rápido permeáron la manera en qué estábamos haciendo música. Y ya cuando se integra Charal y me integro yo, esta idea entre cuatro, pues ya en vivo se veía de una manera que era muy distinta en ese momento a lo demás que se estaba haciendo. Y eso nos permitió llegar a escenarios muy, muy grandes compartiendo y abriendo shows de bandas gigantes. Y eso nos fue cortando los colmillos, afilando los dientes y haciendo la banda que hoy somos. Y si Resorte ha sufrido varios cambios de alineaciones, pero aquí seguimos con el legado.
¿Cómo fue esta colaboración que tuvieron a principios del 2000 con Pato Machete? Para ustedes, ¿fue un momento para entrar al nuevo milenio? ¿Veían a Pato siendo un cantante eterno, es decir, qué envejeciera con ustedes? ¿O solo fue parte de una experimentación?
—Mira, ahí también, o sea, si Tavo estuviera vivo, te diría una historia, Juan te va a decir otra y yo tengo también mi percepción. Yo, para mí, ese momento de la entrada de Pato fue el momento en el que yo estaba ya con ganas de salir y de tomarme un tiempo del proyecto, cosa que hice un año después, entonces antes de que empezaran a grabar el rebota. Entonces yo pienso que fue un momento en el cual el grupo estaba en un parteaguas y que tuvo que renovarse y que ese fue el modo en el que se concibió. Yo pienso que todos teníamos muy claro qué Pato es Pato y qué tiene sus proyectos y su proyecto personal por encima de un proyecto grupal en general. Y que cada quién tiene su naturaleza y esa es la suya.
Entonces yo no pienso que nadie vio esto como una situación definitiva, toda vez que además era un shock para los que nos habían conocido sin un cantante melódico. Ahora desde el punto de vista artístico creo que era una apuesta súper arriesgada pero también súper chingona, porque Pato es un gran cantante, es un muy buen frontman y la relación entre Resorte y Control Machete es desde el inicio. Si tú ves el primer vídeo de ellos, sale Toy con una playera de Resorte. Había una unión entre bandas, una forma de disco disquero. Entonces creo que era un paso natural si iba a ser alguien que cantara que fuese él. Creo que ya viendo en retrospectiva pues dejó, ya solo el disco qué dejó vale la pena. Y la forma en que nosotros ahora interpretamos las canciones que hacemos de ese disco pues lo tienen a él siempre presente de un modo u otro también. Pero también lo tienen presente a Camacho, que el güey como baterista él también compuso gran parte de los rifes de ese disco.
Entonces es un disco en el cual la mitad de los integrantes de Resorte cambiaron. Entonces es un disco muy muy distinto. Entonces ya yo lo veo como una etapa diferente nada más, al igual que lo es ésta. Tampoco sé si esta etapa es definitiva. O sea, yo sé que lo que es definitivo es que con Juan he seguido trabajando en todo este tiempo y quiero seguir trabajando para siempre porque es un brother con el que me entiendo desde tiempos, desde finales de la prepa, al que conozco desde la prepa. Entonces hay una hermandad ahí y un entendimiento a partir de las miles de peleas y de coincidencias y de diferencias que hemos tenido a lo largo de 30 años. Entonces es lo que me queda como alma de este proyecto, la relación con él. Perfecto.
—Y algo que hemos visto, no sé si estoy equivocado, Resorte en algún momento estuvo como nostálgico, como la banda de nostalgia. Pero actualmente hemos visto qué Resorte se ha vuelto nuevamente una banda de actualidad. O sea, nos hemos dado cuenta en los conciertos, por ejemplo, de que hay nuevas generaciones que los tienen como una banda nueva o una banda relativamente nueva y no tienen idea de la historia que tienen y lo ven como una banda cool, pesada, ruda, con una buena imagen sobre el escenario.
—Me encanta, me encanta. Para eso vivimos. O sea, claro que nos va a gustar a nosotros siempre que la banda que nos vio nacer nos siga acompañando. Y también, o sea, a mí me da mucho gusto cuando alguna de estas personas pues me escribe alguna cosa en redes y me dice, oye, puta, ese disco me cambió la vida. O cuándo hicieron este concierto, o sea, como que yo también tengo mis momentos en el cual me acuerdo de un festival que cuando yo estaba chavito me cambió el approach a las cosas o me hizo conocer a ciertas personas o cualquier cosa. Pero no es ese el motor, no es eso lo que me permite seguir creando.
Cuando Tavo se salió del grupo, que fue dos años antes de que falleciera, con Juan nos vimos forzados a confrontarnos, a decir, a ver, ¿qué es lo que ya no queremos seguir haciendo? Y lo que ya no queríamos seguir haciendo era las mismas rolas del mismo modo. Este, porque no lo estábamos haciendo, créeme, no lo estábamos haciendo por nostalgia, lo estábamos haciendo porque no estábamos poniendo como prioridad renovar el proyecto. Y yo creo que por eso llegamos como a ese fin que fue el concierto, el último toquín que dimos con Tavo en el Caradura. A partir de eso nos sentamos, nos pusimos a componer material nuevo. Cuando lo íbamos a sacar, Tavo murió. Entonces pues pusimos eso casi por un año, que nos duró el duelo, luego la pandemia, que todo estaba medio pasando al mismo tiempo.
Entonces creo que, como bien dices, este es un resorte que no mira para atrás. En estos conciertos de aniversario, tocamos material de los primeros discos para toda la banda que nos va a estar acompañando, pero también vamos a tocar todo el República Zombie y también vamos a estrenar una rola nueva que va a salir en estos días. Entonces en noviembre entramos a grabar un nuevo disco, el 20-26 sale este nuevo disco. Entonces vamos a haber sacado por lo menos 30 canciones nuevas, acompañado de unos 7 u 8 vídeos en los últimos dos años. Eso es más de lo que había pasado en los últimos 20. Entonces hay resorte nuevo para rato y la banda que no había nacido cuando el resorte comenzó, pues a mí me llena de orgullo pensar que este mensaje que seguimos gritando sigue siendo relevante, porque lo es para nosotros y sigue encontrando eco en las nuevas generaciones.
—Así es que salud por eso. Perfecto. Y hace un momento mencionaste lo del Aftershock.De hecho, tuvimos la oportunidad de estar ahí presentes y vimos la presentación de ustedes que parecía, o sea, unos minutitos atrás estaba completamente solo el escenario y unos minutitos después tenían más de 4 o 6 mil personas ustedes, cosa que hasta grupos reconocidos no logran en ese festival. Y lo interesante es que no solo tenían a los compatriotas ahí con ustedes, sino que gente anglo y de otras nacionalidades estaban ahí en el moshpit, girando y de alguna manera intentando replicar sus canciones a su propia manera.
—Pues justamente yo pienso que Resorte en Vivo tiene una cualidad particular, primero porque nos lo dejamos todo ahí, pero también porque nos volvimos famosos por hacer buenas presentaciones. O sea, empezamos así antes de tener un disco. Fue eso lo que hacía que la gente dijera el boca a boca de, ya viste cómo empiezan el concierto estos cabrones? Entonces había este grito de guerra que hacía Tau al principio y que todavía seguimos manteniendo, que era como un mazo en la cabeza, así como empezar el concierto con el golpe más fuerte y eso se volvió como un sello. Entonces me encanta que la gente lo siga recibiendo y que eso no tenga nacionalidad o idioma. O sea, el grito de Resorte del comienzo con cómo entran las cosas y en este caso, porque creo que en este show ya empezamos con, no sé si con zombie o con con qué rola estábamos empezando, pero ya estaba así energético desde el comienzo para nosotros. Entonces eso hace que se vuelva como una bola de nieve, sabes? O sea, los 20 que se están acercando y los otros 80 que van caminando al lado voltean con ese primer madrazo y hacen que todo el mundo, empiezas a voltear y ves por qué se mueve todo el mundo rápido hacia un escenario y eso capta tu atención y lo hace de una manera orgánica, que es como yo siento que las cosas en algún lugar tienen que seguir siendo así.
O sea, que una buena banda va a hacer que voltees la cabeza, sabes? O sea, yo he encontrado cosas muy buenas en la vida, la mayoría porque encontré, porque venía escuchando y dije, ay, qué es eso que estoy oyendo? No, porque alguien me dijo, oye, tienes que escuchar a esta cosa, no? Entonces pienso que si las cosas son buenas por su propio peso, pues generan inercia y generan este, pues que la demás gente se quiera acercar, no?
Y tienes alguna historia interesante o pasó algo interesante o extraño o algo que nos quieras compartir cuando tuvieron estos conciertos con Korn hace 15 años?
—Bueno, pues varias cosas, no sé si diría yo tanto interesante, era un momento en el cual Korn no venía en el mejor de sus momentos, venían sin, me parece que era Hedel que no estaba todavía y traían, además del baterista recién se había integrado, o sea, no recién, pero no parecía ser como aceptado como parte completa de la banda, entonces era una suerte de nada más Fildy con Monkey y con Jonathan Davis, no sé, o sea, como que yo lo vi y fue un momento, porque había visto, los había visto hacía muchísimos años atrás cuando nosotros estábamos grabando Extra Large y era como su momento en Follow the Leader, estaban así gigantes, sabes?. Entonces como que fue la primera vez que me vi frente a, órale, cómo cómo algo puede ser grande o pequeño dependiendo de la manera en que lo enfoques y ellos pues le dieron la vuelta y hoy están otra vez gigantes, no?. Ellos traían una formación renovada, se veían poderosos pero en ese preciso momento no se veían tan cabrones y eso nos forzó a nosotros a hacer un show muy demandante.

Pero el problema que teníamos en esa época es que todo el show dependía de nosotros, de lo que hacíamos en el escenario, teníamos un par de mantas colgadas a veces o una cosa proyectada y ya no, no, no estaba alimentado, teníamos un iluminador que hacía que las cosas estuvieran chidas, pero ni de chiste se acercaba a lo que tenemos ahora, entonces pues tuvo su mérito, pues sonar como lo hicimos porque sonamos muy bien y la verdad le aprendimos mucho porque igual ellos en un momento no tan grande de todos modos sonaban como unas, no sé, 25 mil veces más chingón que nosotros, entonces había mucho que aprender ahí del ingeniero que traían y todo, pero sí me hizo ver este lado humano de decir, ah mira los güeyes también tienen altas y bajas y me hizo ver que nosotros teníamos que trabajar mucho por superar la nuestra, porque estábamos ahí recién entrando en esta dinámica que nos hizo dejar de componer y que nos hizo empezar a tocar, como tú dices, a parecer más una banda que celebraba sus éxitos del pasado que una banda que apostara por seguir generando mensajes relevantes para el futuro, entonces esa fecha en particular yo siento que fue un par de aguas, fue un momento de decir, o sea para nosotros, para Juan y para mí y para Charal en ese momento fue de güey hay que ponernos pilas y para Tao fue yo creo que el inicio de su salida, de decir yo quiero empezar a hacer otras cosas. Interesante ángulo. No es la más positiva de todas las experiencias de verdad, pero sí fue interesante.
Hemos tenido también momentos extraordinarios cuando nos tocó abrirle a Green Day, hay cosas increíbles de cuando tocamos antes de Sepultura, de cuando tocamos con Puya y Animal, no sé, o sea tenemos conciertos que nos han llevado a celebrar con banda increíble, a tener encuentros con músicos extraordinarios tras bambalinas y así y después el show te hace después terminar siempre en una ciudad que no conoces, en la casa de alguien que no conocías, este, platicando de cosas interesantes con gente increíble y la música logra eso, entonces cada evento de Resorte es una experiencia interesante en sí.
Así es y hablando de 30 años y que visitaron Guadalajara, pues recordamos los legendarios conciertos de Resorte en el Roxy, un lugar que parecía que se iba a caer a cada momento pero nomás no se caían. Hasta que lo tumbaron por seguridad.

—Pues ojalá y podamos volver a tocar ahí porque la verdad es que conciertos legendarios fueron ahí, presentamos el extra large y tocamos antes, la verdad es que a Guadalajara, o sea realmente queríamos tocar en los lugares donde más habíamos tocado en nuestras carreras, o sea Guadalajara, Monterrey y México son los lugares donde nos hicimos también como banda y donde tocamos con las bandas que para nosotros eran más relevantes en ese momento, los toquines con la cuca, los toquines con puya, los toquines con animal, los toquines con no sé, o sea hay muchos recuerdos, los toquines con Control, los toquines como los top, ¿sabes? Y todo eso pues era la mayoría México, Guadalajara y Monterrey, por eso pues la celebración ahorita es como a modo de también regresar esto a la gente que nos vio por allá, pero también para no ponernos tan nostálgicos pues ponerle un límite, no va a ser una gira de los 30 años de todo un año celebrando la nostalgia, son tres toquines tocando un montón de rolas de los discos anteriores más lo nuevo y después seguimos con lo nuestro que es sacar nuevo material, sale una nueva rola ahora que vamos a estrenar en estos nuevos toquines y después de eso nos metemos a grabar el siguiente disco y salen cuatro rolas más antes de que se acabe este año, entonces va a haber mucho resorte nuevo para rato.


