La polémica rodea nuevamente a Marilyn Manson, luego de que Millie Earl, líder del Consejo de Bournemouth, Christchurch y Poole (BCP), solicitara la cancelación del concierto que el artista tiene programado para el próximo 31 de octubre en el Bournemouth International Centre, debido a las denuncias de abuso y violencia que enfrentó en el pasado.
A través de declaraciones a la BBC, Earl afirmó que el espectáculo no representa los valores de la comunidad local y que su realización enviaría un mensaje equivocado respecto al compromiso social contra la violencia de género.
“No creo que Marilyn Manson refleje los valores que tenemos en BCP. Hemos estado trabajando arduamente en iniciativas como la acreditación de White Ribbon, que busca ayudar a hombres y niños a cambiar conductas negativas y dañinas”, explicó la funcionaria. “Por eso, he pedido a BH Live que reconsidere albergar el show de Manson este año”.
Aunque el ayuntamiento es propietario del recinto donde se presentaría el artista, el Bournemouth International Centre, la gestión directa del espacio está en manos de BH Live, empresa que mantiene un contrato de arrendamiento, por lo que el consejo no tiene autoridad directa sobre la programación. Sin embargo, la petición de Earl fue clara y directa.
Contexto de las acusaciones
Marilyn Manson, cuyo nombre real es Brian Warner, ha enfrentado múltiples acusaciones públicas desde que en 2021 su expareja, la actriz Evan Rachel Wood, lo señalara por abuso físico, emocional y sexual. A raíz de estas declaraciones, varias personas más presentaron testimonios similares, lo que desencadenó una investigación de cuatro años por parte de la fiscalía de Los Ángeles.
Sin embargo, a principios de este año, la Fiscalía del Distrito de Los Ángeles anunció el cierre del caso, señalando que los presuntos hechos estaban fuera del plazo legal establecido por la ley y que no existía evidencia suficiente para presentar cargos por agresión sexual.
A pesar del desenlace legal, la controversia sobre la figura del artista continúa generando reacciones polarizadas en distintas partes del mundo.
Un regreso rodeado de controversia
El concierto en Bournemouth forma parte de la gira que Marilyn Manson ha emprendido este 2025, tras el lanzamiento de su más reciente producción discográfica: One Assassination Under God – Chapter 1, publicada en noviembre pasado. La gira ha sido vista como un intento de reinserción en la industria musical, tras años de silencio público.
De momento, el show sigue en pie y Manson no ha emitido declaraciones al respecto. La presión política y social en torno a su presentación en Reino Unido podría escalar en las próximas semanas, especialmente por tratarse de un evento en Halloween, una fecha simbólicamente asociada con su estética transgresora.
Debate abierto entre arte y ética
El llamado de Millie Earl reabre un debate más amplio: ¿debe separarse al artista de sus actos personales? Mientras algunos defienden la libertad de expresión y el derecho a presentarse si no hay cargos vigentes, otros exigen responsabilidad ética por parte de recintos y promotores ante figuras públicas envueltas en escándalos graves, especialmente aquellos relacionados con violencia de género.
Por ahora, el concierto de Manson en Bournemouth sigue siendo un foco de atención, no solo para los fans, sino también para organizaciones civiles, autoridades locales y medios de comunicación.


